miércoles, 26 de septiembre de 2012

No es el hombre, es el mundo el que se ha vuelto anormal (Artaud)


En esta crisis que padece Europa nos hemos enfrentado al drama de ver desaparecer los valores que la definían hasta la fecha.Una Europa que buscaba el progreso social , la solidaridad entre los europeos , la mejora de las condiciones de vida , el control del poder por el pueblo se ve ahora prisionera de sus detractores.

Si miramos con perspectiva la situación en la que nos encontramos los europeos nos daremos cuenta que no es a una profunda crisis financiera, ni industrial , ni social , ni política  a la que nos enfrentamos ; si no a la demolición de toda la estructura que se fue construyendo laboriosamente desde el fin de la segunda guerra mundial.

La capitulación del Estado de Bienestar a la que estamos asistiendo no  es mas que el derribo del espíritu que ilumino a Europa en los últimos 60 años. La idea de alumbrar un futuro donde las generaciones venideras pudieran convivir en un marco de libertad personal y colectivo , en una economía orientada a buscar el progreso y el bienestar del ciudadano , en un sistema político donde cada ciudadano tuviese el privilegio de ser uno mas entre iguales era el  sueño que los que nos precedieron intentaron hacer realidad.

Asistimos a la degradación de nuestro mundo con la impotencia de un galeote , con la vana esperanza de no hundirnos con la nave. La sociedad que ha alcanzado unos niveles mas altos de cultura, riqueza económica, desarrollo científico-técnico , sistema democrático y solidaridad social asiste impávida a la carcoma de nuestro sistema incapaz de parar su demolición.

Media Europa fenece de riqueza en su  auto-complacencia y la poderosa prepotencia de sus clases dirigentes mientras la otra se enfanga en el lodo de la decrepitud inerme ante la corrupción y el mas absoluto cinismo de las suyas. Ambas se dedican a perforar el casco de nuestra nave con  la inconsciencia del  que socava los cimientos de su casa familiar.

Una crisis que comenzó por la desvergüenza ,el descontrol y la vorágine avariciosa de una élite financiera y que ha acabado por ser endosada a los pueblos de Europa para correr con los gastos.

Nos han preparado la lazada perfecta para que nosotros mismos nos ahorquemos. La Desregularización , la Mundialización , el Neo-Liberalismo , la Ingenieria Financiera , la Deslocalización Industrial  en definitiva todos los fundamentos de esta crisis que han puesto en jaque el crecimiento mundial se gestaron como víboras en nuestro propio seno liderados por las élites económicas y defendidas por una caterva de seudo tecnicos , economistas y pensadores que se movian entre la ignorancia y la mentira como acusaba Maurice Allais (nobel de economía 1988). Y ahora tras poner en jaque , robar y estafar a medio mundo siguen imponiendo las mismas doctrinas con el descaro del delincuente irredento.

Ellos son los delincuentes pero nosotros somos los culpables.

Culpables por inacción.

Culpables por cobardía.

Culpables por confiados.

Culpables por egoístas.

En definitiva Culpables por ser incapaces de oponerse ,de denunciar, de defender , en definitiva de luchar para defender el legado que a nuestros padres tanto trabajo les costo forjar.







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